Más allá del matamoscas: ¿cómo acabar con la plaga de moscas?

Multitud de municipios en España se enfrentan a los problemas derivados de una plaga de moscas

Existen diferentes procedimientos para eliminar la plaga de moscas, uno de los insectos más habituales en las viviendas

El barrio de Os Castros, en A Coruña. La laguna de Torrox, en Jerez de la Frontera. La parroquia de O Val, en Narón. ¿Qué tienen en común estas localizaciones? Recientemente, las tres han sido afectadas por una plaga de moscas. Un contratiempo de gran calibre que despierta las quejas y la preocupación de los vecinos, que ni siquiera pueden abrir las ventanas, para que estas invasoras no se introduzcan en sus hogares.

No es raro encontrar una mosca revoloteando por el interior de las viviendas. De hecho, son uno de los insectos más comunes, especialmente durante los meses cálidos: es extraño el verano en el que no se escucha el zumbido de la plaga de moscas de fondo.

Pero estos animales no solo causan molestias, sino que son antihigiénicos y pueden transmitir enfermedades, ya que acuden y se alimentan de los residuos orgánicos, la materia en descomposición y las heces. Esto les ha granjeado una pésima fama en el imaginario colectivo, hasta el punto de ser asociadas con seres demoníacos como Belcebú.

Y a pesar de que la mayoría son inofensivas, hay algunas notablemente más peligrosas, como la mosca negra. Las hembras de esta especie necesitan sangre para desarrollar sus huevos, por lo que muerden a los humanos, provocando una herida que causa dolor e inflamación durante varios días y, en algunos casos, desencadena reacciones alérgicas.

Es lógico, por tanto, que nadie quiera a las moscas rondando por su casa. Y aunque no es preocupante encontrarse una o dos, que normalmente se cuelan por las puertas y las ventanas, si se descubren varias en un breve período de tiempo podría ser indicio de una plaga de moscas. Una situación más peligrosa y ante la que conviene actuar cuanto antes, puesto que se reproducen muy rápidamente y el problema podría escalar de gravedad en poco tiempo.

Anatomía, hábitos y alimentación de las moscas

Con unas dimensiones que rondan entre los ocho y los doce milímetros, estos insectos voladores, pertenecientes a la familia de los dípteros, se caracterizan por unos ojos de gran tamaño y un cuerpo de color grisáceo o negro, dividido en cabeza, tórax y abdomen. Tienen dos alas y seis patas, con las que son capaces de percibir el sabor y gracias a cuyas almohadillas pueden ascender por superficies lisas o, incluso, caminar boca abajo.

Existen más de 110.000 especies repartidas a lo largo de todo el planeta, cada una de ellas con diferentes hábitos: la mosca doméstica, la mosca de la fruta, la mosca de la humedad, la moscarda de la carne, la mosca tsé-tsé, la mosca de la col, la mosca abejorro

Pero, por regla general, todas ellas son atraídas por los restos de alimentos, la suciedad, las heces y el olor a vinagre y a fruta o carne que comienza a descomponerse. Al alimentarse y reproducirse en la basura, la materia fecal y los productos en descomposición, suelen portar microbios, de ahí que la plaga de moscas pueda transmitir enfermedades a los humanos, desde la diarrea hasta la cólera o la fiebre tifoidea.

Las tiras con pegamento son una de las soluciones más eficaces para atrapar a la plaga de moscas

Con todo, toda moneda tiene dos caras. Estos insectos, capaces de aletear hasta 200 veces por segundo, también son polinizadores, desempeñan un papel importante dentro de la cadena alimenticia y son determinantes para controlar la expansión de otras plagas de insectos.

Las moscas, además, se multiplican muy rápidamente. Pueden poner desde varios cientos a varios miles de huevos en su vida, que puede durar desde un par de semanas hasta más de un mes. También pueden pasar por varios ciclos reproductivos, y la conversión de la larva en adulto se completa habitualmente en menos de una semana, lo que explica la veloz proliferación de la plaga de moscas.

Una vez el huevo ha eclosionado, aparece una larva de color claro, que permanece en el lugar donde ha nacido y se alimenta de los restos en descomposición. Al poco tiempo se forma una pupa de color rojizo, en cuyo interior la larva metamorfosea hasta convertirse en una mosca adulta.

Los mejores tratamientos para la plaga de moscas

¿Una plaga de moscas se ha apoderado de tu hogar o empresa? Aunque al principio pueda cundir el pánico y la primera reacción sea buscar desenfrenadamente el matamoscas, existen multitud de procedimientos para expulsar a estas inquilinas indeseadas de forma eficaz.

Para comenzar, hay una serie de repelentes naturales cuyos aromas logran ahuyentarlas, como el eucalipto, la lavanda, el romero y la menta. Asimismo, es posible crear trampas caseras para atraparlas: la trampa del vinagre, un olor que funciona como un imán.

Para fabricarla, es necesario cortar una botella de plástico por la mitad y rellenar la parte inferior con vinagre. A continuación, se le da la vuelta a la parte de arriba y se coloca encima, como si de un embudo se tratase. Esto confunde a los insectos, que son atraídos por el olor y luego no logran escapar.

Por otro lado, en el mercado se comercializan cientos de tiras pegajosas para colgar por la casa. Estas vienen recubiertas con sustancias que funcionan como un reclamo y consiguen atraparlas mediante el pegamento.

Si la situación es realmente grave y la plaga de moscas altera la vida normal, es conveniente contactar con expertos en su exterminación, en lugar de simplemente adquirir insecticidas, que no son ecológicos y dañan el entorno y el medioambiente.

Las empresas de servicios de control de plagas en A Coruña y Galicia como Sanal Control Medioambiental evaluarán la situación particular y escogerán los tratamientos más oportunos para eliminar la plaga de moscas, utilizando cebos, trampas, larvicidas o tratamientos de pulverización, teniendo siempre en cuenta la seguridad de las personas y la protección de la instalación.

Si se desea prevenir la aparición de estos insectos, es vital tener en cuenta una serie de recomendaciones, como realizar una limpieza profunda con regularidad, mantener tapados los cubos de basura, tirar la comida cuando empieza a ponerse mala, guardar los alimentos en la nevera, prestar atención a las flores marchitas y los comederos de aves, cerrar las puertas y ventanas y, por último, valorar la conveniencia de instalar mosquiteras.

Pero, sin duda, el consejo más útil consiste en ponerse en manos de profesionales si se sospecha que puede estar apareciendo una plaga de moscas. Cuanto antes entren en juego los especialistas, antes será posible recuperar la normalidad.

Más Sanal

Scroll al inicio